martes, 23 de febrero de 2010

Silencio



Viven en mi dos sentimientos distintos, felicidad y desdicha, alegria y pena... y con los dos me llevo francamente bien. A veces me considero afortunado por tenerlos a los dos y otras los repudio a los dos por igual. Pero me siento persona por tenerlos, me siento vivo por poder experimentar la mayor de las glorias y los bajones mas enormes. Me siento como en una montaña rusa y rara es la vez que quiero bajar de ella. Es mi montaña... es mi vida... Y todo ello lo vivo en silencio, en mi interior, intentado que no afecte nada a los demas...
Pido gracias por sentir, pido gracias por estar vivo, pido gracias por tener a mis amigos, pido gracias incluso por no tener corazon en mi pecho... no se donde lo guarde... o a quien se lo di, pero tampoko tengo mucho interes en buscarlo.

domingo, 14 de febrero de 2010

SOLO SU SOMBRA...


Hace cuatro dias que desapareció, de ella solo ha quedado su sombra, triste, lenta, cabizbaja, sin sentido...
El resto, aún no sabe donde está, pero se ha llevado consigo las ilusiones, el afán de superación, las ganas de seguir andando, de respirar y las fuerzas para continuar luchando.
Y mientras tanto, ahí sigue la sombra sola, con la esperanza de encontrar a la persona con la que siempre había vivido, con la impotencia de no saber cómo volver a atraerla, a convencerla para que siga con ella, para que no la abandone en esa situación extraña en la que lo acontecido marca un antes y un despues y deja la vida patas arriba.
Esa sombra no encuentra consuelo, como mucho, se alegra de que quien antes era inseparable sigue viva y respira con mas o menos esfuerzo.
Confía en que las aguas vuelvan a su cauce y confía en perder el miedo que ahora le encoge el alma. Y amarga, se hunde en esa sensación de pérdida de algo sumamente importante, por lo que luchó mucho, en lo que se volcó y se resiste a dejar de hacerlo.
Ha pasado de la decepción a la ira, da ahí a una aceptación impotente, que más tiene de rendición que de aceptación. No ha habido negociación ni pacto alguno.
Y el futuro...no lo ve.
Las sonrisas...no son posibles, porque las sombras, en según que posturas no pueden sonreir.
Intenta, sobre todo, no perder el equilibrio en esta cuerda que se ha aflojado de repente. Intenta que la linea entre la cordura y la locura no se vuelva mas difusa, no por ella, si no por el resto de las sombras que tiene cerca, éstas sí tienen cuerpo y sonrisa.
Solo quiere, que la pesadilla termine, despertarse y ver que ya no está sola, que no es solo sombra, que ya puede sonreir.